¿Cómo hacer fácilmente un lindo rascador para mi gato?

Los rascadores son una herramienta esencial para cualquier dueño de gato. Proporcionan a los gatos una superficie adecuada para hacer ejercicio, afilar sus uñas, marcar territorio y reducir el estrés. Al proporcionar un rascador, puede ayudar a mantener a su gato feliz y saludable, y evitar daños no deseados en su hogar.

Los rascadores son muy importantes para los gatos por varias razones:

Ejercicio y estiramiento: Los gatos necesitan hacer ejercicio y estirarse regularmente para mantener su cuerpo en buena forma. Un rascador proporciona una superficie adecuada para que los gatos puedan estirarse y hacer ejercicio.
Afilar las uñas: Los gatos necesitan afilar sus uñas regularmente para mantenerlas en buenas condiciones. Si no tienen un rascador para hacerlo, pueden recurrir a muebles y otras superficies de la casa, lo que puede causar daños y arañazos no deseados.
Marcar territorio: Los gatos tienen glándulas en sus patas que liberan feromonas cuando arañan. Estas feromonas actúan como una forma de comunicación y ayudan a los gatos a marcar su territorio. Al proporcionar un rascador, los gatos pueden arañarlo y dejar sus feromonas, lo que puede ayudar a reducir el comportamiento territorial en otros lugares de la casa.
Reducción del estrés: Los gatos pueden estresarse fácilmente, especialmente si se sienten atrapados en un espacio pequeño o aburridos. Un rascador les proporciona una actividad divertida y estimulante que puede ayudar a reducir su estrés.

De hecho, los felinos necesitan rascarse constantemente para aliviar el estrés y mantener las uñas afiladas. Por ello, en la Red Zoocial, te traemos tres rascadores caseros para tu gato, sin necesidad de generar grandes gastos económicos ni complicarte en exceso con manualidades.

Una de las opciones más comunes es hacer un rascador con cuerda de pita. Para ello, puedes utilizar tubos, de plástico o cartón, para sostener la estructura del rascador que piensas hacer. Por lo tanto, es aconsejable elegir tubos que sean lo suficientemente resistentes para lograrlo. Después, tendrás que envolverlo con esta cuerda, para que el gato pueda arañar y no acabe dañando los muebles de la casa.Utiliza tubos que sean lo suficientemente sólidos como para soportar la estructura que hará las veces de juguete para tu gato.
Otro rascador útil y de fácil acceso son las alfombrillas, que tienen una superficie rugosa o irregular. Este tipo de alfombrillas están disponibles en tiendas a domicilio, por lo que puedes encargarlas según las características que te parezcan más cómodas para tu mascota.
Este tipo de alfombrillas están disponibles en cualquier tienda o comercio de decoración para el hogar.
Si quieres hacer un rascador más grande para tu felino, puedes utilizar un cubo más grande, como los pies de una mesa. Para fabricarlo, puedes utilizar la pata del comedor o del tablero de la mesa, colocarla y cubrirla con tres tiras de cinta adhesiva. Es importante que la cinta adhesiva esté con su posición invertida. Es decir, con la cola hacia fuera, para poder sujetar la cuerda que empezará a cubrir la pata del mueble.

A continuación, aplica pegamento extrafuerte en los extremos de la cuerda para que aguante el uso que le dará el felino. Por último, enrolla la cuerda alrededor de la pata de la mesa, haciendo presión, para que se adhiera correctamente. Corta la cuerda sobrante, y une el otro extremo de la cuerda al extremo de la pata de la mesa de comedor. Una vez que el pegamento se haya secado, su felino podrá utilizar el rascador tantas veces como quiera.

¿Cómo hacer un rascador de madera para gatos?

El blog hogarmania ha elaborado un paso a paso para construir un rascador fácil de hacer. Para ello, necesitarás madera, un poco de spray adhesivo, una cuerda, una arandela, tirafondos y un destornillador.

Paso 1: Coloca una arandela y un tirafondos en la parte posterior de la cuerda con un destornillador.
Paso 2: Aplica pegamento en spray en la parte delantera para pegar la cuerda.
Etapa 3: Ata la cuerda alrededor de la tabla, dando vueltas.
Paso 4: Corta la cuerda, pegándola para que no se deshilache, y, por último, vuelve a atornillar una arandela con un tirafondos.