5 razones para hacer pruebas de diabetes a su perro

La diabetes mellitus (DM) es un problema hormonal en el que el páncreas no produce suficiente insulina, la hormona que ayuda a introducir el azúcar («glucosa») en las células del organismo. Sin insulina, las células del cuerpo se mueren de hambre de azúcar; por desgracia, esto estimula al cuerpo a producir más y más azúcar (en un intento de alimentar a las células). Por eso la glucemia de su perro es tan alta (lo que llamamos «hiperglucemia») en la diabetes mellitus.

Sin insulina, el azúcar no puede llegar a las células; de ahí que tengas que administrar insulina a tu perro con una pequeña jeringuilla dos veces al día. En los perros, se trata de una enfermedad cuyo tratamiento puede resultar costoso y que requiere la administración de insulina dos veces al día, además de visitas frecuentes al veterinario durante el resto de su vida.

 

¿Cómo puede saber si su perro tiene diabetes?

Los signos clínicos de la diabetes mellitus en perros son los siguientes

• Beber en exceso
• Micción excesiva
• Accidentes urinarios en casa
• Orina diluida
• Sobrepeso u obesidad
• Pérdida de masa muscular
• Apetito voraz
• Infecciones urinarias frecuentes
• Debilidad
• Pelo descuidado o pobre
• Ceguera secundaria a cataratas
• Neuropatías (problemas nerviosos)

 

A medida que su perro envejece, merece la pena hablar con su veterinario sobre la posibilidad de realizarle análisis de sangre rutinarios para asegurarse de que está sano. Estos análisis de sangre ayudarán a descartar problemas renales y hepáticos, anemia, infecciones, problemas electrolíticos y diabetes mellitus. Cuanto antes reconozca los signos clínicos, antes se podrá tratar a su perro con insulina y menos complicaciones veremos como resultado.

 

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Por lo tanto, si nota alguno de los signos anteriores, acuda al veterinario de inmediato.

Ahora, continúe para conocer 5 razones importantes para hacer pruebas para saber si su perro tiene diabetes.

 

1. Su perro vivirá más

La diabetes mellitus puede acortar la vida de su perro, ya que pueden producirse complicaciones secundarias e infecciones. Con la diabetes, el cuerpo está inmunosuprimido y más propenso a desarrollar complicaciones diabéticas que causan daño a largo plazo a su perro.

 

2. Su perro podrá ver

¿Sabía que la mayoría de los perros con diabetes acaban quedándose ciegos a causa de las cataratas? Incluso en los perros diabéticos bien controlados, el exceso de azúcar en el organismo puede tener efectos secundarios en el cristalino; provoca una mayor entrada de agua en el cristalino, lo que altera su transparencia. Como resultado, se produce la formación de cataratas, lo que acaba provocando ceguera e inflamación secundaria en ambos ojos. Aunque la cirugía de cataratas puede (e idealmente debería) realizarse, puede ser costosa.

 

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3. Ahorrará mucho dinero

El tratamiento de la diabetes mellitus incluye la administración de insulina dos veces al día, jeringuillas de insulina, dietas recetadas y frecuentes visitas al veterinario para análisis de sangre. Además, como los perros diabéticos no pueden prescindir de la insulina, puede significar la contratación de cuidadores de casas o mascotas para que traten a tu mascota mientras estás de vacaciones.

 

4. Tendrás menos accidentes urinarios en casa

Uno de los mayores signos de una diabetes mellitus no controlada es beber y orinar en exceso y tener accidentes urinarios en casa. Debido a la hiperglucemia, los perros también corren un mayor riesgo de sufrir infecciones urinarias, que causan estragos en su alfombra. Cuanto antes puedas tratar a tu perro con insulina y conseguir controlar o regular la diabetes, menos beberá y orinará, ¡haciendo que tu perro también se sienta más cómodo!

Tener una mascota diabética es también un gran compromiso, ya que requiere padres dedicados que puedan administrarle inyecciones de insulina dos veces al día.

 

5. Tendrá más tranquilidad sabiendo que su perro está sano

Como veterinario y propietario de un perro, quiero asegurarme de que mi perro está lo más sano posible. Es posible que ya esté hablando con su veterinario acerca de las vacunas cada año en un perro que es mayor de 7 años de edad, a continuación, hable con su veterinario acerca de hacer un examen anual y análisis de sangre de rutina también. Así detectará antes los problemas médicos y podrá estar seguro de que su perro tendrá una vida más larga, feliz y sana.

 

Tener una mascota diabética es también un gran compromiso, ya que requiere padres dedicados que puedan administrarle inyecciones de insulina dos veces al día. El cuidado de un perro diabético requiere visitas frecuentes al veterinario para regular el nivel de azúcar en sangre. Dicho esto, los perros pueden vivir con diabetes durante años con los cuidados y el tratamiento adecuados. En caso de duda, vigile atentamente a su perro para detectar los signos de la diabetes y acuda al veterinario cuanto antes para que le haga las pruebas oportunas.